PERÚ


Mantener una norma como la Ley de Regalías generará menores inversiones a largo plazo debido al estancamiento de proyectos que se avizora en el futuro, lo cual implica un menor desarrollo y un crecimiento de la pobreza, sostuvo el economista Pablo Bustamante. Tras considerarla como una ley absurda por las pérdidas que generará, sostuvo que es la única forma con la que cuentan nuestros funcionarios para hacer política, a fin de obtener votos con medidas populares.

Agregó que el proyecto de Las Bambas tiene más de 30 años en espera y de postergarse por la aplicación de las regalías perderíamos definitivamente la posibilidad de desarrollarlo. 

Situación que también afectaría a otros yacimientos como los fosfatos de Bayóvar. “Lo que ha hecho este régimen en estos tres años ha terminado por dilapidar la confianza de los peruanos en el futuro”, dijo. 

Esto se demuestra, según comentó, en que el 74% de los peruanos se quiere ir del país, y de manera particular, el 83% de los jóvenes prefieren emigrar. “Es una barbaridad, porque la gente no cree en nuestros políticos ni en la política”. 

Así, manifestó que si por un lado se desalienta las inversiones, por el otro se aprecia un crecimiento económico mediocre. El resultado es insuficiente para cubrir los requerimientos de empleo, cuando se espera un aumento mínimo de 7% u 8% por año y a la fecha estamos a la mitad. “Estamos frente a una situación económica mala y una política desastrosa, y lo único que hacen es estabilizar la pobreza”. 

La Sociedad de Comercio Exterior (Comex) dijo que la insistencia en promulgar la Ley de Regalías es el resultado de un gobierno débil que busca el “reenganche” político, a costa de más inversiones y de la generación de empleo. 

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