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El Perú tiene desde hace varios años una Balanza Comercial de Hidrocarburos deficitaria, que ha superado los 700 millones de dólares, pero empezará a revertir a partir del próximo mes de Agosto, en que comenzará a utilizarse comercialmente el gas proveniente de Camisea. Así lo afirmó hoy en declaraciones periodísticas el ingeniero Luis Ortigas, Coordinador Nacional del Proyecto Camisea, quien estimó que a partir del próximo mes la balanza mejorará en un 50 por ciento, teniendo en cuenta que se van a producir alrededor de 30 mil barriles de líquidos que se extraen del gas.

Luego, cuando se desarrolle la segunda etapa del proyecto, es decir, la exportación del gas natural a través de la planta de LNG, que estará ubicada en la zona de Chincha o Cañete y que deberá entrar en funcionamiento el 2008, ya puede ser positiva, manifestó.

En este sentido consideró que, obviamente, el gas boliviano va a competir con el gas nacional, pero que el mercado es lo suficientemente grande para absorber no solo el proyecto que el Perú está tratando de desarrollar, que es un tren de 600 millones de pies cúbicos por día, sino que podría absorber dos trenes de Bolivia.

Dijo que la demanda de México en este momento es del orden de los 2,000 millones de pies cúbicos por día mientras que el nuestro es de sólo 600 millones, lo que muestra que existe un campo para mucho más.

Así, precisó que lo que va a hacer Camisea es sustituir con sus productos los que en este momento venimos importando, a fin de mejorar la Balanza Comercial de Hidrocarburos.

El ingeniero Ortigas declaró, asimismo, que el gas de Camisea va a traer muchos otros beneficios, por tratarse de un combustible más limpio y económico. Indicó que, por ejemplo, el uso del gas en el sector automotriz va a representar un ahorro de aproximadamente el 50 por ciento por el cambio de combustible, y en el sector doméstico de entre el 40 y 50 por ciento.

En lo que respecta a la incidencia del gas en las tarifas de consumo de energía eléctrica, explicó que el ahorro lo estamos sintiendo ya desde hace buen tiempo, dado que en el cálculo de las tarifas se considera los proyectos que van a ingresar al sistema en los próximos 48 meses.

Ello significa que, al estar ya incluido el proyecto del gas de Camisea, ya originó una reducción en las tarifas pero que, de aquí en adelante, van a reducirse más aún.