PERÚ


El precio del petróleo marcó el lunes un nuevo récord y cerró a 43,82 dólares, dos centavos por encima del viernes, en una sesión volátil marcada por el temor y las alertas a posibles ataques terroristas. Durante la sesión, el precio del contrato con vencimiento en septiembre del Petróleo Intermedio de Texas llegó a marcar los 43,94 dólares, muy cerca de los 44 dólares, que se ha establecido como la próxima barrera psicológica a batir.

Por su parte el crudo Brent, de referencia en Europa, subió hoy ligeramente y rozó los 40 dólares al cierre, ya que cerró en 39,97 dólares. 

En cuanto a otros combustibles que se negocian en el New York Mercantile Exchange (NYMEX), el petróleo para calefacción cerró a 1,1642 dólares, 0,4 céntimos menos que ayer, y la gasolina a 1,286 dólares, tras un descenso de casi dos céntimos. 

El gobierno de EEUU puso ayer en alerta especial al sector de servicios financieros de las ciudades de Nueva York y Washington, así como el norte del estado de Nueva Jersey, vecino de la metrópoli neoyorquina y a donde se han trasladado algunas grandes corporaciones. 

Esta decisión fue tomada ante los indicios de que Al Qaida podría estar planeando atentados contra determinadas instituciones, como el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial, en Washington; el banco Citigroup y la Bolsa de Nueva York, y de la empresa de seguros Prudential, en la ciudad de Newark, Nueva Jersey. 

Además de esta amenaza, los inversores están atenazados por otros factores, como la inestabilidad de grandes productores como Nigeria o Venezuela, y los ataques que están sufriendo las instalaciones petroleras de Arabia Saudí e Irak, y que podrían causar interrupciones en el suministro de crudo. 

Pero el principal motivo de preocupación para los analistas, además de la alerta antiterrorista, era la crisis financiera que atraviesa la petrolera Yukos, que concentra la quinta parte de las extracciones de Rusia y el 2 por ciento de todo el mundo. 

Hoy la crisis se vio levemente atenuada, al anunciar el Gobierno ruso su intención de conceder una prórroga de dos meses a la empresa para que salde su deuda fiscal de 3.400 millones de dólares. 

Otro factor que incidió hoy en los mercados fue la entrada en vigor del aumento de la producción acordado por la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) hace unas semanas. 

La cuota de producción de la OPEP (sin incluir a Irak) es de 26 millones de barriles diarios desde el domingo, cuando entró en vigor el último incremento acordado por la organización, que sube esa oferta oficial en 500.000 barriles diarios. 

Se trata de la segunda fase en el fuerte incremento del 10 por ciento pactado por la organización el pasado 3 de junio en Beirut para frenar la imparable subida de los precios del crudo. 

La propia OPEP reconoció hoy que el crudo de referencia de la organización se vendió el viernes pasado a 38,69 dólares por barril, el nivel más alto registrado desde 1990. 

Los precios del crudo tipo Texas, que se toma como referencia del petróleo estadounidense, se encuentran ahora incluso por encima de los de octubre de 1990, en los meses previos a la Guerra del Golfo, y son los más altos desde que se fundó el NYMEX, hace ahora 21 años. 

En cuanto a otros mercados financieros, las amenazas de atentados terroristas no tuvieron un gran efecto sobre las cotizaciones en Wall Street, pero sí sobre el dólar, que hoy perdió terreno frente al euro y el yen pese a la divulgación de cifras económicos que muestran que la economía de EEUU sigue creciendo.